Los promotores chinos de CSP contratan asesores extranjeros para acelerar la implantación

Los promotores deben subsanar la limitada experiencia acumulada que poseen y los desafíos climatológicos de China para cumplir los estrictos plazos de construcción establecidos en el primer programa de desarrollo a gran escala del país, según dicen los expertos del sector.

China adjudicó en septiembre de 2016 su primer lote de 20 proyectos de CSP, incluidas nueve torres solares, siete centrales de sistema cilíndrico-parabólico y cuatro centrales de tipo Fresnel lineal.

Está previsto que los proyectos se acaben antes de finales de 2018 para poder acogerse a la tarifa de alimentación (FiT, por sus siglas en inglés) de 1,15 yuanes por kWh (0,17 $/kWh). Este plazo proporciona a los promotores poco más de dos años para asegurar la financiación, seleccionar una contrata de ingeniería, adquisición y construcción (EPC, por sus siglas en inglés) y construir la central.

Un plazo de dos años podría bastar en mercados de CSP más maduros, pero no en mercados en desarrollo como el de China o India, según ha asegurado Fengli Du, vicesecretario general de China National Solar Thermal Energy Alliance, a New Energy Update.

“Dos años no basta para la construcción de una central de CSP, especialmente cuando debemos enfrentarnos a los inviernos del noroeste de China, cuyas temperaturas extremamente bajas podrían impedir los trabajos de obra civil durante varios meses”, explicó Du.

Cuando India fijó un plazo similar (28 meses) para la puesta en marcha de siete proyectos de CSP en 2013, los promotores solicitaron una prórroga de 6 a 12 meses. El gobierno de India respondió ampliando el plazo en 10 meses, pero los problemas con el cierre financiero, la infraestructura del emplazamiento y la entrega de material retrasaron los proyectos y tan solo pudieron completarse tres.

En fecha más reciente, las autoridades de Dubái han proyectado un período ventana de tres años para la construcción de un complejo termosolar de torre de 200 MW, la segunda central de CSP de los Emiratos Árabes Unidos.

La Autoridad para la Electricidad y el Agua de Dubái (DEWA, por sus siglas en inglés) deberá adjudicar el contrato para el proyecto durante la segunda mitad de 2017 y espera que el complejo solar esté en funcionamiento antes de abril de 2021.

Ventanas climatológicas

Muchas de las primeras centrales de CSP chinas se ubicarán en emplazamientos sometidos a condiciones climatológicas extremas, como puedan ser las regiones occidentales de Qinghai y Yunnan.

Estas regiones pueden verse afectadas por tormentas de arena y temperaturas que llegan a oscilar entre valores tan bajos como los menos 40 grados Celsius y tan altos como 20 grados Celsius en un mismo día, ha explicado Wei Zhu, director general de Thermal Focus, un proveedor de sistemas de seguimiento solar radicado en Shanghái.

Según Du, algunas empresas prefieren continuar la obra civil durante el invierno mientras aseguran la financiación y llevan a cabo las licitaciones para los trabajos de construcción.

“Todas tratan de completar sus proyectos dentro del plazo previsto”, aseguró.

En la actualidad China posee un historial de éxitos en el desarrollo de centrales nucleares, centrales de combustible fósil, hidroeléctricas, fotovoltaicas y eólicas, pero tiene poca experiencia en la construcción de centrales de CSP a gran escala.

“El principal desafío es la falta de experiencia en el diseño e integración del sistema. China posee numerosos circuitos y sistemas de demostración, pero ahora la capacidad mínima [en el programa piloto] es de 50 MW. Pasar de 1 MW a 50 MW no será fácil”, ponderó Du.

 Centrales de CSP operativas en China

Fuente: CSP Today Global Tracker (datos de febrero de 2017)

Para acortar la curva de aprendizaje y disminuir los riesgos del proyecto, los promotores locales están actualmente contratando consultores expertos en CSP a escala internacional.

Por ejemplo, la consultoría de ingeniería alemana SolEngCo fue seleccionada por un instituto de diseño de energía eléctrica chino con objeto de que proporcionara servicios de ingeniería básicos y generales para una central de CSP china, según ha contado Wang Zhen, representante en China de SolEngCo, a New Energy Update.

La empresa hispano-sueca AF Aries Energia también ofrece soporte al proyecto de 50 MW Delingha de CGN Power Group como ingeniero del propietario, sirviéndoles de guía en el proceso de licitación para seleccionar la contrata de ingeniería, adquisición y construcción y el equipo principal.

Mientras tanto, Advisian, la empresa consultora a escala global de WorleyParsons, asume la función de ingeniero propietario de una torre solar de 50 MW suministrada por la contrata de ingeniería, adquisición y construcción North China Power Engineering (NCPE).

Apoyo en la distribución

Una de las principales ventajas para los promotores de China es la extensa cadena de suministro del país, que requiere muy pocas importaciones.

Los principales componentes, como los tubos receptores del sistema cilíndrico-parabólico (elementos de recogida de calor), reflectores, vidrio bruto, sales fundidas y aceite térmico, pueden suministrarse e instalarse a un coste relativamente bajo.

“China posee una industria manufacturera sólida y el coste del material a granel es bajo a escala nacional”, ha explicado Fabio Wang, director técnico de SunCan, la filial especializada en CSP de Beijing Shouhang IHW Resources Saving Technology Co.

SunCan desarrolla en la actualidad una torre solar de 100 MW en Dunhuang, en la provincia de Gansu, y es el proveedor tecnológico de dos proyectos de torres solares de 100 MW en Jinta y Yunmen, también en la provincia de Gansu. La empresa es además la contrata de ingeniería, adquisición y construcción de un proyecto de sistema cilíndrico-parabólico de 50 MW en Delingha, provincia de Qinghai.

Al trabajar conjuntamente con empresas consultoras y de ingeniería internacionales, las empresas chinas se benefician de la experiencia obtenida en otros mercados, ha explicado Du.

“Los promotores chinos deben tener la mente abierta y solicitar ayuda de los equipos internacionales más experimentados, especialmente los ingenieros de propietarios... [aunque] China posee su propia coyuntura, al menos se podrán evitar muchos errores”, concluyó.

Por Heba Hashem

Traducido por Vicente Abella